Sastre, de 35 años, recala en la capital altoaragonesa procedente del Sporting de Gijón, club en el que ha militado las últimas diez temporadas. Con los rojiblancos ha disputado 52 encuentros en Primera División y 257 en Segunda, siendo titular indiscutible durante siete campañas en la categoría de plata y en el retorno de los asturianos a la máxima instancia futbolística (2008/2009). En los dos ejercicios anteriores (2009/2010 y 2010/2011), el concurso del lateral diestro ha sido menor, habiendo jugado ocho encuentros, siete de ellos como titular, en la temporada que hace poco dijo adiós.
Rafel Sastre se incorporó a la élite balompédica en el Mallorca B, en donde debutó en Segunda División en la temporada 1998/1999. Desde ahí, desde su tierra, emigró para defender la camiseta del Cádiz en Segunda B (1999/2000 y 2000/2001) pasando desde la Tacita de Plata al Sporting. Ahora, en el ocaso de su trayectoria deportiva, apuesta por sumarse al proyecto de la SD Huesca y lo hace, además, con plena ilusión.
|
Sastre posando con la camiseta de la SD Huesca |
LA "SERIEDAD" DE LOS AZULGRANA, OTRO FACTOR CLAVE
Sastre terminaba contrato en el Sporting y desde hace un mes había comenzado los contactos con el Huesca. La renovación de su hermano Lluis acercó definitivamente las posturas. "Quedaba poco que hablar ya", explicó el jugador, así que en la mañana de ayer, tras apenas unos minutos en las oficinas, se certificó su fichaje.
"La posibilidad de jugar con mi hermano ha pesado bastante. Siempre había tenido ilusión en enfrentarme con él, pero ahora ha surgido la posibilidad de compartir equipo y después de quince años casi sin vernos había que tenerlo en cuenta", destacó Rafel.
Otro factor clave en su apuesta por el Huesca es el de las garantías que ofrece el conjunto altoaragonés en los compromisos con sus jugadores. Y es que tanto en el Cádiz como en el Sporting le ha tocado a Sastre vivir situaciones complicadas respecto a los pagos. "Sé bastante bien lo que hay en el Huesca. Y un factor importante en mi decisión ha sido el de la seriedad, y no sólo por lo que me ha contado mi hermano, también lo que comentan otros jugadores. Tengo 35 años y habiendo pasado lo que he pasado en el Cádiz y en el Sporting no tenía ganas de volver a pasar por lo mismo", indicó.
El lateral de Binissalem llega al Huesca dispuesto a aportar "trabajo, que es lo único que puedo prometer, dedicación absoluta".
Dejar Gijón supone "un cambio, pero lo más importante es adaptarme lo antes posible a los compañeros y al club. Cuanto antes lo haga, mejor para mí", apuntó. Informaciones acerca de lo que es el Huesca y lo que es la ciudad de Huesca, tiene de sobra, "pero no dejar de ser algo nuevo para mí. A lo mejor no, pero creo que necesitaré cierto tiempo para adaptarme al cambio, respecto a lo que he hecho en los últimos diez años", aseguró Sastre.
Según Rafel, el Sporting y su nuevo destino, el Huesca, tienen "muchas similitudes, porque en Gijón siempre hemos sido un equipo sufridor, tanto en Primera como en Segunda División".
Agustín Lasaosa, vicepresidente y consejero delegado, hizo ayer de maestro de ceremonias en la presentación de Rafel Sastre, a quien quiso agradecer "el esfuerzo" realizado por el futbolista para fichar por el Huesca y le deseó "mucha suerte" en su nueva aventura.